El colectivo Défenseurs Plus está preocupado por la violencia que se sigue registrando en el país. En las últimas semanas, esta violencia ha causado pérdidas de vidas humanas y bienes. Según los datos recopilados, más de 200 personas fueron asesinadas en la localidad de Source Matelas, otras 93 en la localidad de Cité Soleil en enfrentamientos entre bandas rivales y casi 25 personas perdieron la vida en ataques contra la zona de Debussy y sus alrededores. Unas 15 personas fueron asesinadas por hombres armados la tarde del 24 de abril de 2023 en la localidad de Fort-Jacques. En las zonas atacadas por grupos armados, decenas de casas han sido saqueadas e incendiadas y miles de personas han sido desplazadas. Las fuerzas de seguridad tardan en rescatar a las personas en peligro. Algunas personas mueren a causa de sus heridas por falta de tratamiento. Todo en un país sin electricidad, sin agua potable, sin servicios estatales.
La situación ha durado bastante tiempo y miembros de la población han sido horriblemente masacrados y otros han huido de sus hogares sin tener un lugar seguro donde refugiarse. Gran parte del país está controlado por bandas armadas y todas las áreas de la región metropolitana enfrentan violencia alimentada por individuos empeñados en destruir vidas. Los gritos de desesperación se escuchan en varias zonas a la vez, entre ellas Source Matelas, Meyotte, Route-de-Frère, Debussy, Laboule, Thomassin, Cité Soleil, Solino, entre otras. El mismo escenario se observa en zonas del departamento de Artibonite, en particular en Carrefour Peigne, Lestère, Petite-Rivière-de-l’Artibonite. En las zonas atacadas, la gente es apedreada, descuartizada, quemada y fusilada; mujeres y niñas son violadas; Los ancianos, las mujeres embarazadas y los niños no se libran de estas acciones criminales.
El colectivo Défenseurs Plus señala que el gobierno de facto no es capaz de ofrecer una solución a las diversas crisis sociopolíticas que enfrenta el país, incluidas la violencia armada y la inseguridad alimentaria. Los haitianos sueñan con huir del territorio nacional entregado a bandas armadas. Las fuerzas de seguridad nacionales están luchando por hacer frente a la situación. Algunas personas influyentes prefieren reforzar a las bandas armadas con equipos comprados en otros países en lugar de apoyar a la policía nacional. Se siguen importando armas y municiones y se sigue reclutando a jóvenes y niños para fortalecer los grupos armados. El derecho a la vida y la seguridad humana están constantemente amenazados y no pueden ser garantizados por las autoridades actuales.
Además, los derechos humanos deben ser protegidos no sólo por el Estado de un país, sino también por los organismos internacionales de protección de los derechos humanos. La Organización de Estados Americanos (OEA) tiene como objetivo, entre otras cosas, defender la democracia y los derechos humanos y fortalecer la seguridad de los territorios de los países miembros. No se ha hecho nada en el caso de Haití, que lleva algún tiempo en agonía. Por tanto, las Naciones Unidas, que promueven la protección de los derechos humanos en los países, no parecen preocuparse por la situación actual. Por lo tanto, siendo Haití un país que experimenta una gran inseguridad y sin poderes estatales legítimos, uno se pregunta por qué la población sigue abandonada a su suerte, sin asistencia de la comunidad internacional.
Defenders Plus insta al gobierno de facto a dejar de utilizar el dinero del país para privilegios personales ya que no se ven resultados. Defenders Plus enfatiza ante los miembros de la OEA y la ONU que el pueblo haitiano tiene derecho a protección, incluida la seguridad y el derecho a la vida. Los instrumentos legales para la protección de los derechos humanos, a nivel regional e internacional, colocan a los seres humanos en igualdad de condiciones independientemente de su raza y el país en el que viven.
El colectivo Défenseurs Plus hace un llamado a la población haitiana a organizarse para enfrentar la amenaza de grupos armados tolerados por las autoridades gubernamentales y judiciales. Es urgente tomar el control de nuestro destino como pueblo para construir una sociedad democrática y segura y contribuir al progreso social y económico del país.

Hecho en Puerto Príncipe, el 24 de abril de 2023.
Antonal MORTIMÉ
Codirector